Actualmente muchos jóvenes deciden colocarse piercings en cualquier parte de su cuerpo, como la nuca, la nariz, el ombligo, algunas partes intimas, las cejas, sin embargo existe una zona del cuerpo donde puede afectar estructuras adyacentes donde se encuentre el piercing, esto es, en la boca, ya sea en la lengua, labios, encía, mejillas o inclusive frenillos.

Para las personas esto no es un punto importante pero las razones por las que deben pensar tres veces antes de colocarse un piercing en boca son las siguientes:

1. INFECCIONES Y ENFERMEDADES DE TRANSMISIÓN.

Nadie les asegura que el material que van a utilizar para hacer dicho procedimiento en realidad esté estéril, que pase por un estado de lavado, desinfección y esterilización.

Que el sistema de esterilización sea el correcto y este calibrado, que usen los mejores sistemas y productos para la desinfección después de haberse utilizado en alguien más, e inclusive que el lugar donde se guarden dichos instrumentos esté limpio, ya que no importa si el instrumento esta dentro de una bolsa y se haya desinfectado y esterilizado de la forma correcta, si no hay una zona limpia en donde guardarse, ese material puede estar comprometido por bacterias.

También debemos tener en cuenta que las enfermedades como el herpes o la hepatitis B y C son enfermedades muy silenciosas, la notamos cuando ya hay síntomas graves.

2. INFLAMACIÓN Y DOLOR.

Muchas veces las personas buscan un lugar barato, pero, ¿alguna vez han investigado si la persona que les va atender esta realmente capacitada?, a veces por pena o porque simplemente pensamos "si no supiera no tendría gente o no estaría ahí", pero esto puede salir muy caro, ya que se puede llegar a complicar y más si hablamos de estructuras bucales, recordemos que esa es la vía de entrada para nuestro sistema.

3. HEMORRAGIAS.

La boca, al igual que la cabeza, es una de las regiones más irrigadas y llena de venas y arterias. Por muy simple que parezca tener una zona anatómica grande donde solo se vean ojos, boca, orejas y cabello, hay muchas arterias pequeñas que viajan de un lado a otro y no por ello la boca esta exenta de ello.

Además de que no todos tenemos la misma anatomía, por tan solo unos milímetros puede variar de una persona a otra una arteria de grueso calibre y esa puede ser la diferencia entre una hemorragia o no.

Si no se controla la hemorragia y no hay los cuidados necesarios durante esto, puede llegar a contaminarse el torrente sanguíneo y las bacterias alojarse en alguna otra parte del cuerpo, pudiendo crear una endocarditis bacteriana.

4. ALTERACIÓN DEL GUSTO

Algunas veces con la realización de los piercings se pueden dañar nervios o partes de la lengua, principalmente, ésta es la encargada de percibir los sabores, pero también el paladar, ya que muchas personas pueden perder la capacidad de percibir el sabor de los alimentos, y algunas veces esto es irreversible.

5. RECESIÓN GINGIVAL

La fricción causada por los piercings en el labio puede ocasionar dicho problema, este problema es irreversible, ya que la pérdida de encía en esta zona hace que se expongan las raíces de los dientes, y esto puede crear problemas dentales, como irritabilidad a los cambios de temperatura, desgaste de las raíces, entre otras.

6. FRACTURA DENTARIA

El que se pueda jugar con el piercing en boca y se cree un mal hábito con éste, puede crear fracturas dentarias y puede comprometer la estructura del diente.

Y recuerda, haz tu hábito ir al dentista.